La EPILEPSIA CATAMENIAL es una forma de Epilepsia que hace alusión a la estrecha relación entre las crisis epilépticas y los cambios hormonales. Por ejemplo, pensemos en una niña -con o sin antecedentes de potencial lesión cerebral-, cuyo desarrollo temprano y académico ha sido aparentemente normal y que el día que menstrúa por primera vez (menarquia) presenta, sin causa aparente una crisis convulsiva.
Este evento es obviamente dramático e impactante, y suele ser el inicio de una interminable secuencia de crisis que se presentarán en torno a la menstruación, y menos frecuentemente en fase con la ovulación.Esta evidente asociación con la menstruación origina el adjetivo de catamenial (catamenia=menstruación). Es sabido que los estrógenos, abundantes en la mujer joven y madura, son estimulantes de la actividad cerebral y "pro-epilepsia". Por otro lado, sabemos que la progesterona es capaz de inducir sueño y aún estado anestésico superficial, y por ende la consecuente inhibición de crisis epilépticas en modelos de laboratorio y en algunos pacientes. La interacción mencionada de hormonas femeninas y la función cerebral se amplía otros espacios.La administración de anticonceptivos hormonales disminuyen los niveles sanguíneos de los medicamentos antiepilépticos, facilitando la presentación de crisis. Esta información fundamental debe ser conocida por todos los médicos generales y ginecólogos que atienden a mujeres con Epilepsia en edad fértil. La participación del Epileptólogo es fundamental.
Por otro lado, el complejo evento de un embarazo expone interacciones aún no comprendidas del todo. Un 25% de las mujeres con Epilepsia al embarazarse no tendrán crisis, aún en la ausencia de medicamentos antiepilépticos. Otro 25 % de mujeres con Epilepsia al embarazarse responderá con un incremento en el número de las crisis y el resto de las mujeres con Epilepsia no tendrán mayor modificación en su cuadro basal de epilepsia.
Este es un poderoso argumento para que exista una interacción profesional entre el Neurólogo-Epileptólogo, el Ginecólogo y la Paciente con Epilepsia en proceso de embarazo.
Asímismo, debo recordar a la pareja de una paciente con Epilepsia, que deben programar con anticipación el embarazo, para dar tiempo al Epileptólogo que haga el ajuste de medicamentos apropiado para disminuir los riesgos de malformaciones y/o abortos en el futuro embarazo.
Obviamente, el equipo médico involucrado en el momento del parto, debe saber que la probabilidad de presentación de una crisis en estas pacientes es muy alta y deben tomar las precauciones apropiadas en cada caso, consultando al Epileptólogo.